Cuando los dientes están apiñados o no están colocados correctamente podemos tener molestias importantes como dolor en la articulación, pudiendo provocar hasta dolor de cabeza. Suele ser un dolor que no responde a los analgésicos. Habituales chasquidos, que se producen en las articulaciones al abrir o cerrar la boca que indican la existencia de alguna alteración.

Con la ortodoncia además de conseguir unos dientes correctamente alienados, mejoramos los problemas óseos y de mordida. Además, favorecemos una mejor limpieza de los dientes, rediciendo caries y enfermedad periodontal.

Es la más habitual, permite una correcta distribución de los dientes para mejorar la estética, la oclusión y todo tipo de disfunciones.

Pueden ser bracket metálicos o cerámicos (estéticos). Los dos cumplen la misma misión, la diferencia es el tipo de material. La duración y resistencia es la misma. La ventaja de los estéticos es que se ven menos.

Es un tratamiento altamente eficaz por la personalización de cada caso, ya que los bracket se hacen a medida y se colocan en la parte posterior del diente. Conseguimos un efecto estético.

Es un sistema por el que el arco que se coloca en la boca permite que las piezas se muevan con más libertad y de forma más rápida.

Bracket transparentes, más discretos, cómodos y fáciles de mantener limpios.

En este tipo de tratamiento utilizamos férulas que se cambian cada dos semanas. Podemos quitarlas para comer y realizar una correcta limpieza de los dientes.

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